Puertas adentro
nadie sabe lo que sucede
con la salud
con el dinero
con el amor.
La inmunidad del gesto
y la conducta
traduce al observador
una realidad
que esconde toda posible advertencia.
Puertas adentro es uno
y Dios
uno y la muerte
uno y el deseo
uno y los propios sueños
o miedos.
Individuales mundos
luminosos u oscuros
los simuladores
van llevando su impronta
por doquier.
No hay comentarios:
Publicar un comentario