Aquí todo puede suceder
ver al maligno silbando
con mandinga
y los siete diablos
jugando en la ruleta de tu suerte
a ver quién se queda
con las balas o tus pocos dientes.
Un amuleto o un disparo
y la muerte que va en pañales
empardando tus viejos naipes
pisando suave y de taquito
a los bichos de tu suerte
que ya no te sirven de nada
muertos en tu propia nariz.
Aquí todo va pintando lindo
como esas raras melodías
que giran en un disco rayado
mas de cien mil veces
y se van diluyendo tus sueños
machacados y podridos
te van doliendo despacito.
Vendiéndole el alma
marcando las cartas
poniendo las trabas
largándole los perros
a la mezquina suerte
dejándola ser...
Quién tiene el secreto de todos los trucos
designios antiguos de tontos mandatos
destino del torpe
piquete de ojos a todos los diablos
que tienen los nudos del viejo Pilatos.
Aquí o allá todo puede suceder
los malditos no tienen patria
ni mesa en que comer
ni el paño verde donde deslizar la trampa
a aquel que siempre la supo jugar
con buenas mentiras lápiz o papel.
Siempre estará ahí el ángel de la poca suerte
rodeado de insectos larvas o gusanos
llevándose de la mano a algún inocente
y la muerte que se ríe siempre convencida
de que hoy te tocó a ti.
Vendiéndole el alma
marcando las cartas
poniendo las trabas
largándole los perros
a la mezquina suerte
dejándola ser...
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