He hecho tantas cosas idiotas en nombre del amor,
que lo que menos me preocupa
es nombrarlo en un poema,
me han llamado loco, tonto, mentiroso,
hasta me han dicho
que soy un idealista perdido,
un descarado, un atrevido del sinsentido,
incluso que solo lo nombro para hacerme notar,
un egolatra buscando admiración,
pero... lo cierto, es que para mí, es un signo de pregunta,
un verdadero acertijo...
y en un ritual cotidiano intento nombrarlo,
buscar nuevos sentidos, nuevos significados,
llegar a su raíz y a todas sus respuestas...
que no tengo, aunque tenga amor en muchas de sus formas...
Tal vez esto sea una botella, "mi botella al mar"
para que otro la tome y la llene de respuestas...
No sé porque, no sé cual es la razón,
y no logro desenmarañar nada, o todo y giro perdido y sin razón a veces,
camino en círculos, o quizás "en corazones" y, a corazonadas, digo, siento, y escribo...
A los 6 años este perro siente necesidad de ladrar,sin morder,siempre hice las dos cosas,sobre todo en noches de luna llena... ladrar a las sombras ,a los gatos y a los extraños ;de una vez por todas debo empezar a ladrar con sentido,como lo haría un perro con experiencia,un perro que en ocasiones aulla y no ladra,que le llora a la luna,y que en otras solo mueve la cola con una sonrisa de oreja a oreja, jadeando y con la lenga afuera.
viernes, 24 de febrero de 2017
EN NOMBRE DEL AMOR...
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