Tengo el deseo obsturado,
miro el vacío desde una cumbre deshabitada,
y solo sé que debo abrir mis alas,
contemplo lo que queda de aquello
lo que alguna vez fue mi mundo,
haz hecho el amor con las alas abiertas?
bueno así me siento, esperando...
como se espera en la soledad,
toda la vida se condensa en un orgasmo,
un arrebato blanco, un impulso rojo matinal.
Espero esa brisa antigua
que regrese y me de en el rostro,
ahora todo es silencio...
Un punto verde domina el paisaje amarillo lunar
y todo se ilumina desde un costado del planeta,
a medias...
Hay una melodía, creía que era música de sueños viejos,
vidas pasadas, o la vibracion esférica de la tierra,
es solo el sonido de mi alma...
Estoy listo, me lanzo al vacío y mi vuelo es un espiral interminable,
otro paso onírico...
y el fundamento de la vida
se despeja de dudas...
Descubro su esencia.
A los 6 años este perro siente necesidad de ladrar,sin morder,siempre hice las dos cosas,sobre todo en noches de luna llena... ladrar a las sombras ,a los gatos y a los extraños ;de una vez por todas debo empezar a ladrar con sentido,como lo haría un perro con experiencia,un perro que en ocasiones aulla y no ladra,que le llora a la luna,y que en otras solo mueve la cola con una sonrisa de oreja a oreja, jadeando y con la lenga afuera.
jueves, 25 de mayo de 2017
Volver a volar
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